Se cumplen 40
años de una jornada que ha quedado señalada como festiva en la larga historia
de Andalucía. Aquél último día de febrero de 1980 se canalizó en las urnas una
demanda social y política para no quedar relegada y conseguir el reconocimiento
del derecho a una autonomía al mismo nivel que otras Comunidades de España a
las que se les adjudicaba el calificativo de históricas.
Después de un
camino lleno de dificultades y rompiendo la estrategia de oposición del
gobierno central, ese día se votaba en referéndum la vía por la que conseguir
el autogobierno, y por tanto, asumir las máximas competencias, o seguir un
desarrollo lento.
Aquel 28 F fue
protagonista el pueblo andaluz aquel día cambió el curso de la historia de
nuestra tierra.
